Luisa regresa de un centro psiquiátrico después de una severa depresión post-parto. Su deslumbrante hogar se vuelve su nuevo lugar de confinamiento. Rodeada de su familia y una cuadrilla de empleados que se esfuerzan para que sus arrebatos permanezcan invisibles e imposibilitada de seguir interpretando su rol de esposa y ama de casa, su única escapatoria es deslizarse elegantemente hacia la locura.